¡Qué sería de la vida sin emociones! Hace una semana que las emociones no dejan de estar presentes en nuestro alrededor y se lo debemos a todos ustedes.
Ya pasó una semana de la presentación en Buenos Ares de Magia es Viajar y seguimos recordando las emociones de ese día. En ese momento, mientras miraba el video que usamos para dar inicio a la presentación, se me humedecieron los ojos. Ver todas esas imágenes de distintos paisajes, personas y momentos que mostraban por qué Magia es Viajar me hicieron caer en la cuenta de todo lo que habíamos hecho, de todas las sonrisas que habíamos «arrancado» y de todo lo que estábamos soñando por hacer. Sentí que realmente finalizaba una etapa, una gran etapa de Magia en el Camino, y empezaba otra, con otros tiempos, otras prioridades y de a tres, pero que el sueño seguía. Y me emocioné. Y las lágrimas no se contuvieron.
No iba a ser la única vez.
Luego de escuchar la carta que Jime y Andrés nos leyeron para presentarnos como viajeros, volví a emocionarme. Saber que pudimos ayudarlos en algo antes de salir a cumplir su sueño y que ellos lo recuerden con tanto cariño provocó en mí otro coletazo de emociones. Saber que guardan con tanto cariño la carta firmada que les regalamos antes de partir nos encantó.
Pero las emociones seguirían.
Emocionarse también implica llorar. Como cuando expliqué por qué el libro está dedicado a Tahiel, al inicio, y a Cristian, al final. Lo de Tahiel no necesita mucha explicación, lo de Cristian sí. Cristian es mi primo, que nos dejó mientras hacía lo que tenía que hacer para cumplir su sueño. Toda su vida soñó con ser piloto y lo había logrado, pero quería más. Quería ingresar a una aerolínea internacional y para eso necesitaba mejorar su inglés y tener más horas de vuelo. Y en eso estaba cuando nos dejó. Estudiando inglés y sumando horas de vuelo. Para esto último, los fines de semana volaba en una avioneta que llevaba publicidad. Un día la avioneta falló y él se fue. El final del libro es el final de una etapa que implicó mucho esfuerzo. Dedicarle el libro al final es una manera de homenajear a todos los que cotidianamente hacen cosas por cumplir sus sueños y vivir como les gusta.
Emocionarse también implica reírse. Como con el video de dígalo con mímica en mongol o con el de Felipe, el camionero colombiano, relatando goles del fútbol argentino.
Emocionarse también implica reflexionar. Como cuando hablamos de las costumbres en otros países, tan diferentes a las nuestras, o sobre la visión de la magia en África.
Emocionarse también implica que se nos haga un nudo en la garganta. Como cuando Dino habló de lo que la magia significó y significa en su vida o sobre la importancia de aprovechar la única vida que tenemos y entender que el tiempo es lo más valioso con lo que contamos.
Pero una de las mayores emociones fue cuando me di cuenta de la cantidad de gente que nos estaba acompañando ese día.
–Dino, no entra más nadie. No podemos dejar entrar a más nadie. –le dijo Martina a Dino mientras yo hacía los sorteos y él se iba a cambiar para el show de magia.
–No. –le dijo Dino con cara de «¿qué querés qué haga?» y siguió su camino.
Gracias por llenar el Centro Cultural Casa de la Lectura, gracias a todos los que fueron y a todos los que nos mandaron mensajes avisando por qué no podían estar ese día. Les aseguro que igual los sentimos muy cerca. Perdón a los que se quedaron amuchados al fondo o, directamente, permanecieron en el hall. Nos hubiera gustado que todos estuvieran más cómodos, pero nos superó. Había más de 200 personas (lo sabemos porque repartimos más de 220 números para el sorteo!). Gracias por acompañarnos siempre.
Jime y Andrés, de lavidadeviaje.com que nos presentaron como «viajeros». Gracias, chicos!
Esteban Alef, un gran mago amigo, que nos presentó como «magos».
Nuestro moderador de lujo. Gracias, Pablo!! (de polviajero.com)
Martín y Esteban, dos genios que hicieron magia al principio del evento, mientras las personas buscaban sus ejemplares o esperaban la firma.
Después de la presentación «propiamente dicha» hubo unos snacks, bebidas y sandwichitos para festejar, gracias a aseguratuviaje.com. (Aunque algunos se quedaron afuera y no llegaron a comer!)
Ese día, Vero, una de nuestras lectoras y, ahora, amiga, le regaló a Tahiel una hermosa remera. No es la primera que tiene un gesto así hacia nosotros. Nos sentimos muy mimados y agradecidos. Gracias!
Y la emoción siguió cuando llegamos a casa y al otro día, y al otro, y al otro… cuando leíamos los mensajes que nos dejaban en facebook o los mails que nos mandaban. Gracias. Fueron días de muchas emociones, de sentir que todo el esfuerzo valió la pena. Gracias por ayudarnos a sentir que vamos por el «buen» camino, por el camino que elegimos ir.
El evento no podía terminar sin magia, así que Dino se cambió e hizo un divertido show, que todos disfrutaron!
Hace no muchos días vino un chico a casa que recién está empezando a viajar. Vino a buscar su ejemplar y cuando se lo dimos, lo miró por un par de segundos y nos dijo: “Qué lejos estoy de esto”, mientras lo movía hacia arriba y hacia abajo. Nos reímos pero nos dejó pensando. Cuando nosotros empezamos no sólo estábamos lejos de “esto”, sino que además, pensábamos sólo en viajar, en contarle a la familia y a los amigos lo que andábamos haciendo por ahí, y en hacer magia para ganar dinero y seguir viajando. Hoy, gracias a todos ustedes que nos siguen y nos apoyan estamos donde estamos, que no sabemos si es mucho o poco, pero seguro que está muy lejos de aquel mayo de 2010.
GRACIAS. GRACIAS. GRACIAS. GRACIAS. GRACIAS. GRACIAS. GRACIAS. GRACIAS. GRACIAS. GRACIAS. GRACIAS.
Gracias a todos los que nos ayudaron ese día con las cajas, con la comida, con el sonido, con la proyección. Gracias a todos los que desinteresadamente colaboraron con el libro, con su edición, con su diseño, con su corrección, con todo!
Pueden ver más fotos en este link.
Tahiel les dice Gracias a todos!
Si quieren conseguir el libro Magia es Viajar, pueden hacerlo escribiendo un mail a libro@magiaenelcamino.com.ar o completando el breve formulario al hacer clic en el botón «Quiero mi libro»:
La venta del libro nos ayuda a seguir con todo lo que significa Magia en el Camino.
Gracias!
